ENTREVISTA

The Braves Records nace en 2015 para editar el doble vinilo de “Atlas”, el debut en largo de Catorce. ¿Tuvieron algo que ver los problemas con Madhatter a la hora de editar “Atlas” en formato CD?

JOSÉ MIGUEL: Realmente la edición en vinilo fue en parte debida a la demanda que hubo en su momento, unida a las ganas de seguir avanzando como banda, profesionalmente hablando. Aunque he de reconocer que por otro lado, Ojete Mordaza II de Obsidian Kingdom (gran amigo, mejor batería y grupo) me lió bastante para adentrarnos en la aventura que supuso.

Además pensábamos que “Atlas” merecía una edición así de especial y cuidada, nuestra inquietud no nos permite parar ni un segundo.

Fue el primer paso de un bonito camino que empezamos en The Braves Records, para posicionarnos dentro de una escena nacional un tanto difusa, en la que es complejo sobresalir e incluso subsistir.

Supongo que aprendiste mucho de esa experiencia, ¿no, Semi?

JM: Como todo en esta vida, se aprende por experiencia propia, no ajena; principalmente equivocándote, pero volviendo a intentar hacerlo mejor.

Primero el crowdfunding, que tan solo ponerlo en pie conlleva un trabajo enorme; después el desarrollo de la campaña, junto con la preparación y pedidos de todo lo que creamos para la ocasión; y por último, el tema de envíos.

Hubo gran cantidad de imprevistos y retrasos en la fabricación del vinilo, la mayoría de ellos ajenos a nosotros, pero al final salió medio bien el asunto. Todo es siempre mejorable, así que en eso estamos.

¿Y en lo que a Madhatter se refiere?

JM: En cuanto al “sello” (por no personalizar), nos sentimos muy decepcionados en general. Tuvimos el disco parado casi un año con promesas de edición que poco a poco fueron transformándose en una especie de coedición entre ellos y nosotros en la que erróneamente confiamos. Cansados de esperar y de excusas, acabamos pagando todo nosotros y aún confiando en que pagarían su parte, motivo por el cual incluimos su logo y demás en la edición de CD. Afortunadamente, llegamos al punto de recuperar la inversión de esos CDs bastante rápido; aunque sin haber visto un céntimo por parte de Madhatter, motivo por el cual decidimos cortar la relación profesional y posteriormente incluso personal que teníamos.

Ahora que donde más se venden discos y merchandising es en los bolos, ¿no es un poco locura montar una discográfica?

KANTZ: Precisamente una de las cosas que nos empujan a hacer esto es que nosotros trabajamos a esa escala, donde vamos a tocar con cualquiera de nuestras bandas irá nuestra tienda; al final nosotros tampoco tratamos de ganar dinero, sino invertirlo en música, apoyando a bandas y recuperar, en la medida de lo posible.

JM: Es exactamente eso, en cierto modo es unir dos de nuestras pasiones: tocar en directo y apoyar a bandas que creemos que lo merecen. En cierto modo, puede servir de puente o regeneración.

¿Tenéis alguna filosofía o modus operandi en The Braves Records? ¿Es la amistad una parte fundamental del proyecto?

K: Efectivamente, supongo que por nuestras inquietudes tarde o temprano lo hubiéramos hecho si nunca nos hubiéramos conocido, pero tuvimos la suerte de encontrarnos y nuestra relación personal es fundamental en este proyecto. Nos apoyamos mutuamente en cada decisión porque confiamos en el criterio del otro y eso no podría ser si no fuéramos a fin de cuentas, dos amigos con una idea en común.

JM: La verdad es que nos entendemos rápidamente y bastante bien, que es algo complicado en el mundo musical. Es lo típico que se dice a veces, parece que nos conocíamos desde hace mucho más tiempo del que realmente es.

En cuanto al funcionamiento, generalmente compartimos bandas con las que podríamos colaborar entre nosotros o que bien nos llegan de alguna manera, lo escuchamos y si nos gusta, nos ponemos en contacto con el grupo para ver de qué manera podemos ayudar.

Kantz, tú ya tienes experiencia en la autoedición. Corrígeme si me equivoco, pero Tenpel siempre se ha autoeditado, ¿no? ¿Cómo se siente uno siendo responsable de todo el proceso productivo de sus ediciones?

K: Sí, aunque lo cierto es que en su día, cuando empezamos a trabajar con Nico (Nicolás García, mánager de Tenpel) fue a través del sello que él había montado con Pablo Iglesias, Inferno Recordings. Nuestro primer LP “Areté Despierta” se editó en físico con ellos y también el EP “El método silencio”, pero antes y después de aquello siempre hemos trabajado de forma autogestionada. Al final, mi forma de entender esto es que al nivel al que nos movemos la autoedición y la co-edición es la mejor manera de funcionar, teniendo el control de lo que haces o dejas de hacer.

Nosotros queremos ayudar a las bandas pero nunca vamos a meternos en su manera de actuar o producir, sólo queremos ser parte aunque sea de manera ínfima de proyectos con los que nos sentimos identificados y que realmente nos gusten. Es trabajo duro ser la cabeza y la mano que maneja cada vector, pero para mí al menos, merece totalmente la pena, tus logros serán tuyos y tus palmadas también.

Normalmente los artistas suelen odiar la promo y mucho más los rollos burocráticos. ¿Cómo se os da a vosotros?

K: Bueno, no es cuestión de odiarlo, es que es una cosa más bien coñazo; pero por otro lado también es parte de tener una banda, no es sólo hacer canciones y pagarte un disco; si tienes un grupo y ese es tu planteamiento, muy mal. Hace poco Pau Navarra lo explicaba muy bien en un artículo en el que nos tachaba y con toda la razón de “quejicas llorones, filósofos de red social” [risas]. Tener un grupo con la intención de salir de tu local de ensayo es hacer canciones, grabar canciones, tocar canciones, enseñar canciones y vender canciones; con todo lo que ello conlleva, desde currarte un diseño para cada cartel concierto a ahorrarte alojamiento durmiendo en casa de colegas.

Nosotros tenemos la suerte de contar con un “equipo” además de Semi y yo que nos echa una mano en estos temas, por ejemplo tenemos a Maribel (que también es la pareja de Semi), sin ella estaríamos un poco en bragas en todos los temas de gestión y nos ayuda muchísimo con la promo, es nuestra Señora Lobo particular.

JM: Sé que lo mismo suena repetitivo, pero tiene razón. Particularmente, siempre he llevado todos los temas no musicales de Catorce y es muy duro, pero alguien tiene que hacerlo si queremos salir de la cueva. Y de mi mujer, ¿qué os voy a contar? Nos ayuda muchísimo en temas que se nos escapan un poco a los demás, lo cierto es que hemos conformado un equipo bastante bueno mediante la especialización de tareas.

¿Qué se gana y qué se pierde siendo dueño de tu propia música y responsable de su promoción y gestión?

K: Es más o menos lo que explicábamos antes, se gana ser tú el dueño de tus aciertos y tus errores, siempre es aprender y mejorar; incluso cuando lo haces bien, creo que lo que se pierde siempre sólo es dinero y eso crece en los árboles ¿no?

JM: Te diría que sobre todo pierdes tiempo y dinero, por no decir a veces incluso salud; pero igualmente te digo, que lo que me da la música no me lo da nada en esta vida, porque todo lo bueno tiene su precio. Y esto es tan solo una pequeña extensión más. Es lo que me gusta, es lo que amo; incluso a Maribel la conocí en un concierto de Catorce, por tanto incluso es parte de mi vida personal y me ayuda mucho a realizarme.

Los álbumes de Tenpel están en descarga directa en la página web de la banda o a Name your price en Bandcamp. También todas las referencias de Catorce. De momento los de The Braves Records no. ¿Hay alguna razón? Por vuestra experiencia, ¿creéis que la gente descarga y no apoya? ¿Devalúa la música el “todo gratis”?

K: Lo cierto es que no, es interesante descubrir la cantidad de gente que descarga mediante pago, yo siempre fui reticente pero un día me sorprendí a mí mismo comprando discos digitales en bandcamp y me di cuenta de que merecía la pena; sobretodo porque la mayoría y en nuestro caso también, pone añadidos, no sólo descargas un mp3 u otro formato de calidad, hay contenidos adicionales y a poco que te lo curres, la gente lo va a agradecer mucho.

Con Tenpel siempre fue así, desde nuestro primer disco “Aretê Despierta”, que pusimos en descarga directa a finales de 2006; fue un pelotazo que la noche de lanzamiento nos petó el servidor, no podíamos creerlo. Meses después, ya en 2007, Radiohead hizo lo propio con “In Rainbows”, desde entonces todo el mundo empezó a hacerlo y a nadie le parecía mal. Empezabas a descargarte discos de gente que seguían exactamente nuestro archivo de descarga al pie de la letra, con sus documentos de texto con las letras, algunos incluso con la misma tipografía… No es que sea un flipao, pero igual que he reconocido muchas de nuestras cagadas en ese sentido, sí que debo reconocer que con aquello fuimos novedosos.

Sinceramente yo creo que ahora mismo nuestro “deber” como sello es pedir un mínimo, porque ahora no sólo nos dedicamos a nuestros propios grupos y el trabajo por poco que sea tanto de las bandas como por nuestra parte, merece una ayuda que nos permita poder seguir haciéndolo. Creo que la gente lo comprende y lo respeta, y la mayoría de personas lo hace de esta manera porque saben que lo que compran merece la pena.

JM: Eso mismo iba a decir yo [risas]. No, en serio, seguimos creyendo y valorando positivamente el tema de las descargas gratuitas, junto con todos los aspectos positivos que puede aportar. No creo que devalúe de por sí tu trabajo, pero dependiendo del ámbito y tus expectativas, hay muchos factores a tener en cuenta y no siempre puede hacerse. Pensamos que todo tiene su momento y sobre todo que la aportación mínima que pedimos es casi simbólica (porque tanto Bandcamp como Paypal se quedan también su trozo del pastel), pero nos ayuda mucho a poder seguir haciendo cosas, junto con la venta física.

Pienso que hoy día para vender discos hay que cuidar la presentación. ¿Qué ofrecéis vosotros en lo que a estética se refiere?

JM: Nosotros solemos hablar de esto bastante, por ejemplo con el nuevo disco de Catorce estamos dando bastantes vueltas pensando en cómo hacerlo “distinto” sin que haga que aumente el precio de venta demasiado; y en el de De la cuna a la tumba pues el exterior del digipack creo que se sale bastante de lo habitual, el propio CD es completamente negro... Dentro de nuestros grupos tenemos control total y siendo Kantz también un diseñador acojonante, pues es todo más fácil. Pero en los demás proyectos en los que participamos es distinto, solemos respetar los conceptos originales; a no ser que nos pidan opinión o ayuda, en lo que igualmente tratamos de colaborar lo mejor que podemos.

K: Con mi estudio, The Braves Church (facebook.com/thebraveschurch) tenemos la suerte de poder participar en el diseño y dirección de arte de muchos discos de todo tipo y te das cuenta de lo que te pide la gente y ves que al final no se trata de sorprender, sino de repetir y de copiar. Es increíble la cantidad de emails que tengo pidiendo una portada “estilo MUCHA” cuando lo que se quiere decir es estilo Baroness, por ejemplo; aunque, por suerte, la mayoría se deja aconsejar. Pero de repente, te encuentras con bandas que realmente no son obedientes y hacen todo lo contrario a lo que se espera de ellos. Por ejemplo, uno de los últimos trabajos que hemos hecho para la banda CUZO (un disco que además co-editamos con Underground Legends, y una de las bandas de psicodelia rock más loca), han pasado de la estética habitual y han buscado sorprender, crear su estilo visual. Al igual que Turbian, tú ves la portada con el bodegón de la perdiz y los limones en el sin fin azul, y no imaginas qué es lo que vas a escuchar. Para mí obviamente la presentación es primordial, al final el que compra discos hoy en día es casi un coleccionista: de esos que se graba su copia para el coche y el disco lo mantiene en la caja, ese objeto lo conserva y como tal debe estar cuidado, ya sea en CD o en vinilo.

¿Os planteáis The Braves Records como una democracia? ¿Es una premisa que estéis los dos de acuerdo para editar algo?

K: Bueno, hasta ahora ha funcionado así, ¿por qué íbamos a meternos en algo que no nos gusta a los dos? Yo creo que eso no tiene sentido. Quizá la afinidad que tenemos en lo musical ayuda mucho en este aspecto, aunque tengo claro que algún día me haré con todo el control, que yo soy muy de dictaduras y tal.

JM: El problema es que no sabe que, sigilosamente, lo he ido poniendo todo a mi nombre. Pero mientras me sirva, seguiremos siendo el dúo dinámico; eso sí, yo me pido ser Batman, por razones obvias [risas]. Ahora en serio, aunque somos algo eclécticos en gustos y aunque coincidimos en bastantes cosas, tampoco tenemos gustos 100% idénticos; pero lo veo positivo, porque creo que somos muy comunicativos y dialogantes. Generalmente, nos entendemos a la perfección en cuanto a qué y cómo hacer las cosas, algo crucial para mí en cualquier trabajo en equipo, lo cual también es fruto de tener muy claro lo que queremos alcanzar. Yo lo veo muy enriquecedor, aprendo mucho y sobre todo disfruto.

¿Os marcáis límites en vuestra política de edición? ¿Editaríais algo, digamos, más mainstream, si os gustara lo suficiente?

K: Claro que sí, editamos lo que editamos porque, primero, al principio eran sólo nuestras bandas y segundo, porque son las bandas que se interesan en nosotros; pero aquí la única premisa como indica nuestro nombre es ser valientes, nos importa un carajo si el disco es de hardcore, de doom, de rap o de pop. Nuestra propuesta estética es una actitud, no un estilo: tan valiente como lo seas tú. De hecho, cuantas menos etiquetas, mejor.

JM: Claro, de hecho hace nada estuvimos a punto de ayudar a un artista que, simplificando, hace pop; y en breve, planeamos editar físicamente el primer EP de Hasta siempre, Sarajevo, proyecto en solitario de Jaime (cantante/guitarrista/poeta soltero y sin compromiso de Catorce), titulado "Norte EP" y que tiene formato acústico. La cuestión aquí es que nos guste y que le veamos algo distinto, igual que valoramos que necesite “ayuda”; no vamos a meternos en algo que tenga posibilidades (por el motivo que sea) de editarse fácilmente por sí solo, ya no porque sea más o menos conocido, sino porque se sale realmente de uno de los motivos por los que montamos esto.

Vamos a hablar un poco de vuestras ediciones hasta el momento. Dejando aparte el disco de De la cuna a la tumba, que ya tiene el recorrido y, digamos, el prestigio suficiente, acaba de ver la luz un EP de Delobos, grupo que Kantz formó en 2012 con Raúl Mingorance, compañero en Tenpel. ¿Es un aperitivo de un largo? ¿Formarán parte de él estos tres temas? ¿Va el álbum completo en esta línea?

K: Efectivamente, Delobos ha estado funcionando desde entonces, de forma más pausada, pero no hemos parado de componer e incluso hemos dado unos cuantos conciertos con diferentes formatos de banda hasta que finalmente se ha montado una banda (con batería, bajo, guitarra y voz) que es con la que por ahora vamos a funcionar. Estamos preparando un disco que saldrá también a finales de año, aunque aún no hemos definido de qué manera ni en qué formato, pero tenemos un buen puñado de buenas canciones tengo que reconocerlo.



También tenemos a Turbian, una banda post-hardcore/black/verbena/subidón-subidón, que, corrígeme si me equivoco, incluye algún miembro de Virgen. ¿Qué aspectos destacaríais de la banda? ¿Por qué decidisteis ficharlos?

K: Lo cierto es que nosotros no les hemos fichado, creo que ese concepto, al menos al nivel al que se mueven los sellos como nosotros está obsoleto; nosotros colaboramos con ellos y ellos a fin de cuentas con nosotros, nos echamos una mano mutuamente.

Llegamos a ellos porque Jorge, cantante de Virgen y efectivamente guitarra en este proyecto, nos lo enseñó cuando estuvimos haciendo la mini gira sureña con De La Cuna a la Tumba y ellos. Desde aquél momento ya nos quedamos prendados, es que pienso que a cualquiera que se lo hubieran enseñado hubiera querido poner su grano de arena [risas]. Es un proyecto brutal, Turbian es un tractor tuneado con unos altavoces de 1000w de potencia encima de cada rueda, el conductor totalmente borracho de orujo, lleva una navaja de 7 muelles con la que se va haciendo cortes en forma de símbolos ocultistas en el pecho, apretándole al pie va enfilado en dirección al puto Fnac de Callao.



Hace poco en vuestro Facebook pusisteis un enlace de Bandcamp del nuevo álbum The Zeta. Por lo que he leído sois muy fans de la banda y les seguís hace tiempo. ¿Cómo surge el contacto con el grupo venezolano? ¿Hay fecha de edición o sigue en el aire?

K: Fue un descubrimiento para mí, una banda increíble con mucha fuerza pero con mucha sensibilidad con la que me siento totalmente identificado. Al tiempo de conocerlos, me puse en contacto con ellos y como era de esperar son gente especial y muy abierta; siempre con un “hermano” por delante, un día empezamos una conversación sobre editar alguno de sus trabajos y ellos mismos se ofrecieron a grabar un disco con temas selectos de su discografía especialmente para nosotros. Ahora mismo están haciendo una gira presentando su último disco “L'Antiteoria del Todo” y en principio la idea es que a su vuelta, se dedicarán a esta grabación. No tenemos una fecha, pero yo deseo que sea lo antes posible.



Después del verano caerá un plato fuerte, “Agua. Naufragio. Equilibrio.”, el segundo largo de Catorce, del que salió un teaser hace ya un tiempo. ¿Qué podemos esperar del trabajo en comparación con “Atlas”?

JM: Pues la verdad es que estamos muy ilusionados con este disco, es un paso adelante bastante considerable en cuanto a lo musical. Vamos, yo he llorado bastantes veces escuchando sólo la mezcla [risas].

Compositivamente siempre nos ha influenciado bastante la época que vivíamos social, personal y musicalmente; pero sin perder de vista nuestras raíces. Creo que, en cierto modo como pasaba en “Atlas”, todo eso puede verse fácilmente de nuevo reflejado en el disco.

Sin embargo, los temas son más directos y cortos, aunque no por ello menos enrevesados ni épicos en ocasiones; otras más sencillos, pero igualmente emotivos. Por momentos somos esos Catorce duros, progresivos, con ramalazos de stoner y post rock; pero ahora también sacamos incluso más a relucir nuestro lado más suave, más pop, aunque siga siendo duro. Pop duro siempre he pensado que no sería una mala etiqueta, por ejemplo para mí, Havalina es lo que hacen (magistralmente).

Vaya lío, ¿no? Pues es complicado definirlo de otra manera, si en Radio 3 ya lo advirtieron una de las veces que nos pincharon, diciendo que lo mismo recordábamos a Vetusta Morla que a Black Sabbath por momentos, este disco no va a ser más fácil de encasillar.

K: Yo sólo puedo añadir que Catorce en realidad fue la chispa de todo esto, descubrirlos, conocerlos y de ahí en adelante. Soy muy fan de la banda y este va a ser un disco muy sonado, estoy completamente convencido.

Y, sé que ya anda maquetado, también está el segundo de De la cuna a la tumba. Supongo que eso es a largo plazo, para el año que viene, ¿no?

JM: En principio grabaremos las bases en directo en La Mina con Raúl Pérez en agosto, para posteriormente arreglar ciertos detalles y rematar con las voces; pero sí, básicamente estimamos que para principios del año que viene podría salir, si va todo bien. Aunque lo cierto es que en directo ya hemos tocado varios e incluso por youtube ya rondan algunos de esos temas nuevos.