Hay cosas que no se cuentan en Al borde del naufragio, pero siendo de la misma ciudad se sobrentienden, es una complicidad extraña.
Con Alabanza igual, el punto de vista rural del libro, de su pasado, podría hacerlo mío si quisiera, incluso la parte parricida. Y creo que es porque somos del mismo sitio y en muchos sitios como los que se describen en el libro (pasado y presente) las cosas siguen siendo así, y se ven de dos maneras diferentes aquí, o asimilas ese tipo de vida o te sientas en un sillon taciturno a mirarlo con perspectiva. Es como si escribiera para los (auto)desterrados que vivimos aquí.
En este libro no hay tanta descripción, aunque empieza todo seguido sin parar durante algunas páginas y a los cinco minutos ya estás pensando en donde vas a poder hacer una pausa xD
El siguiente es este.
![Imagen](http://i.imgur.com/dNT0GjF.jpg)