CRÓNICA

Crónica: Fernando Martín
Fotos: Bilbao BBK Live

La tercera edición del festival bilbaíno se presentaba esta vez con un cartel más popero y rockero, con una orientación musical más clásica y abierta al gran público. En esta ocasión el metal brillaba por su ausencia y los principales referentes pasaban a ser en su totalidad grupos de los considerados míticos, pero no solo por los jóvenes, sino también por gente más entrada en edad. LastTourInternational siempre ha tenido mano a la hora de elegirlos, procurando que gusten a un abanico suficientemente amplio como para garantizar la asistencia de un gran número de personas, aunque había dudas. Es evidente que The Police y R.E.M. son más del gusto de gente de 30 o 40 años que de 20, franja social que además suele disponer de más recursos económicos, pero ¿interesaría a ese colectivo ver a estas bandas en medio del monte, con lo que todo ello supone?, ¿pasaría factura a la promotora el hecho de cerrarse a los estilos citados, primando totalmente los sonidos más mainstream, coincidiendo además en fechas con el Rock In Rio de Madrid?

Sea como fuere y antes de comentar los resultados me gustaría permitirme una pequeña crítica constructiva, en parte como recomendación, en otra parte como petición. El año pasado pudimos ver en el recinto de Kobetas a grupos secundarios de la talla de Incubus, Mastodon, Billy Talent o My Chemical Romance. Grupos que tienen un sonido más moderno o diferente al establecido en esta edición del festival. No sabemos si la tomada este año será la que se pretenda como identidad definitiva, ni sabemos si aquí sería posible, ni si aún pudiendo se querría hacer algo similar por ejemplo al Rock Am Ring, una de las grandes citas europeas sin duda alguna… Pero aquí también hay demanda de este tipo de grupos, y no se debería pasar por alto. Hay demanda de heavy y a pesar de no entrar en el Bilbao BBK Live se buscó otra alternativa (en parte debido al clamor popular, ya que LastTourInternational reconoció que recibieron infinidad de correos pidiendo más presencia del género) y sería un detalle que tanto otros tipos de metal, al igual que hardcore, punk… recibieran también algún tipo de consideración.

Dicho esto vamos a repasar cada uno de los días de un festival que al menos en cuanto a asistencia volvió a ser un éxito, ya que a pesar de los caprichos del clima reunió a una media de más espectadores que en las anteriores ediciones del evento. Como cifra total, por si interesa, la cosa quedó en torno a los 80.000 espectadores.



VIERNES 4

El primer día del Bilbao BBK Live 2008 se presentaba a priori como el más compensado, pues a The Police se unían bandas como The Charlatans, The Dandy Warhols o Morcheeba, todas ellas de cierto renombre hoy en día. Pero antes de éstas pudimos disfrutar de otros grupos como los portugueses The Gift, en cuya personal mezcla de pop y electrónica sólo falló el sol abrasador, y The Raveonettes, que también hicieron un buen trabajo a pesar de que la mayoría de asistentes estaban centrados en otros menesteres.

Como suele ocurrir el ánimo del personal iba creciendo según pasaban las horas y Morcheeba procuraron también poner su granito de arena en ello. Sin sorpresas y presentando su último trabajo, “Dive Deep” sonaron bastante finos. Acto seguido tocaba el turno a The Dandy Warhols, y para entonces ya se iba acumulando una cantidad importante de gente, si bien parte de ella sólo pretendía hacerse con un buen sitio para ver a The Police, sin duda el gran referente del día y para muchos el único grupo que les había animado a asistir al festival. Sobre The Dandy Warhols no hay mucho que decir, y se puede resumir en que son un grupo del montón, bastante insípido, pero con un temazo como la copa de un pino. No sé si tanto como unos one hit wonder, pero al menos dieron la sensación de estar bastante cerca de ello. The Charlatans fueron el grupo elegido por muchas personas para ir a cenar y por otras muchas para seguir a través de las pantallas mientras cogían sitio para la siguiente actuación. No dieron un recital, pero su música es suficientemente interesante como para merecer más atención.

Aunque los que realmente importaban eran The Police, un grupo al que muchos dábamos por imposible verlos una sola vez en directo, pero que tras una espera eterna y rezos o súplicas infinitos se nos presentaban como uno de los mejores regalos musicales de nuestra existencia. Era la oportunidad de nuestra vida para muchos de los que estábamos allí y sólo queríamos disfrutarla, por lo que simplemente nos dejamos llevar por la magia del momento. Actuaron de una forma un tanto calculadora, como si tuvieran un guión ensayado y no se pudieran salir prácticamente de él, pero demostraron que son unos genios, regalándonos además cuatro canciones extras insertadas en dos bises, dejando en total un conjunto de unos veinte temas entre los que no faltaron “Message In A Bottle”, “De Do Do Do, De Da Da Da”, “Roxanne”, “So Lonely” ni “Every Breath You Take”. Mención especial para el maestro Copeland y agradecimientos al clima, pues la lluvia que nos acompañó en algunos momentos no pasó de unas cuantas gotas que no molestaron lo más mínimo, no como al día siguiente…



SÁBADO 5

El sábado Bilbao amaneció lloviendo, atardeció lloviendo… y no, a la noche no hubo sorpresa. Este contratiempo condicionó muchísimo la jornada, pero aún así los nombres de Lenny Kravitz y R.E.M., e incluso también de The Prodigy, pesaron lo suficiente para que el gentío fuera más que considerable. Armado de ropa de abrigo y chubasquero subí al recinto un poco más tarde de lo ideal, pero tampoco estaba como para forzar la cosa. Para entonces la hierba había desaparecido y el barro poblaba el suelo. Sonaba el indie-pop de The Fratellis y eran los menos los que se atrevían a moverse un poco.

Lenny Kravitz fue sin duda uno de los triunfadores del festival. Mucho se le ha criticado siempre por no tener una personalidad propia, por dejarse influir demasiado por los artistas a los que admira, pero eso no quita para que tenga una colección de canciones que muchos compañeros querrían para ellos. Si a esto sumamos la facilidad que tiene para hacer un espectáculo dinámico y su simpatía con el público no hay más que hablar. Presentaba nuevo disco, “It is Time For A Love Revolution”, pero como no podía ser de otra manera sonaron también varios de sus clásicos, entre los que destacaron “American Woman” y “Fly Away”. Hacia el final bajó a saludar al público, con paseo incluido por la pasarela central. Un señor este Lenny, que nos dejó a todos con un gran sabor de boca.

“Orange Crush” dio inicio al concierto de R.E.M.. Se hicieron esperar, pero al público no le preocupó demasiado, a fin de cuentas era imposible mancharse más y lo único que quedaba era disfrutar de uno de los grupos punteros del evento. Para dar más vidilla a la actuación se valieron de varias grandes pantallas, pero aún así la cosa iba más destinada a los fans. Al resto se nos hizo un poco largo debido en parte a la cantidad de temas del “Accelerate”, aunque los que aguantamos pudimos escuchar el gran final compuesto por el clasicazo de la banda, “Losing My Religion”, así como “Imitation Of Life”, “Supernatural Superserious” y “Man On The Moon”. Dieron una actuación sobria, aunque les faltó algo de emoción o capacidad de sorpresa. Tras ellos era el turno de The Prodigy, grupo que debía haber actuado algunos meses antes en fiestas de Bilbao y que no lo hizo por culpa de un espabilado que filtró la noticia. Su electrónica bailable sonó tan bien como siempre, pero la repuesta de los asistentes no fue la misma por culpa del barrizal. En vez de darlo todo en conjunto, la mayoría optó por romperse de forma individual. “Breathe”, “Out Of Space” y “Firestarter” fueron algunos de los temas que hicieron a unos cuantos retrasar su regreso a casa. Con ellos terminaba el movimiento en los escenarios ese día y se completaba el grueso del festival.



DOMINGO 6

Día poco atractivo a priori el domingo, tanto en lo musical como en las pocas ganas que nos quedaban a todos tras la vivencia del día anterior. Al menos el tiempo dio un respiro. En principio parecía buena la idea de celebrar el evento en los tres últimos días de la semana, pero visto lo visto habría merecido más la pena hacerlo de jueves a sábado. Habría sido más incómodo para los currantes, pero ya que la última jornada no era demasiado interesante, la opción de poner un jueves menos cargado, un poco como presentación, y luego dos días grandes el viernes y el sábado debería ser contemplada para próximas ediciones. Si ya la gente iba de por sí cansada, ver cómo todos los conciertos se celebran en el mismo escenario, mientras desmontan el otro, y sentir como se acumulan hasta dos horas de retraso por esta decisión… lo cierto es que desanima a cualquiera.

En lo referente a la música, el grupo grande del día eran Tequila, flanqueados por ZZ Top, que actuaron antes de ellos, y The Madness, que lo hicieron después. A primera hora pudimos disfrutar de Quique González con sus acompañantes La Aristocracia Del Barrio. Parece el madrileño bastante considerado por la promotora, puesto que ya le llevó el año anterior al Azkena de Vitoria, y lo cierto es que poco a poco y gracias a oportunidades como ésta su música de cantautor va ganando más adeptos. Sin hacer mucho caso a The Blues Brothers esperé a la actuación de Riders On The Storm para escuchar unos temas de los míticos The Doors. Ahora sí era el turno de ZZ Top, uno de los grupos de rock más auténticos de la escena mundial que sonaron sin fisuras, dando un conciertazo y sorprendiendo a unos cuantos de los allí presentes.

Los últimos a los que vi fueron los cabezas de cartel de la jornada, y más que nada por ser ellos, porque el cansancio y los compromisos de un lunes laborable no contribuían precisamente a seguir por allí. Presencié pues la vuelta de Ariel Rot, a quien ya disfrutamos en la primera edición del festival junto a Andrés Calamaro, cuando escuchamos un par de temas de los Tequila, que teníamos delante. Lo cierto es que “Salta” o “Rock And Roll En La Plaza Del Pueblo” fueron un buen colofón personal de un Bilbao BBK Live 2008 al que poco se le puede objetar, a excepción del cambio a peor de las fichas de las consumiciones (aunque bastante más lío fue en el Electric Weekend) y la decisión de poner sólo un establecimiento de comida, cosa que hizo que la calidad disminuyera en gran medida. Lo demás referente a la organización prácticamente como siempre, lo que quiere decir que bastante bien. Tocará volver una vez más el año que viene.