electronic / industrial rock / alternative rock / industrial metal / alternative metal / noise rock
 Nine Inch Nails
The Downward Spiral
ZONA-ZERO
99
169 VOTOS
87
+
Nine Inch Nails

The Downward Spiral

Publicación:
Marzo 1994
Sello:
Nothing / Interescope
Productor:
Trent Reznor, Flood
Género:
metal, pop-rock
Estilos:
alternative rock, industrial rock, industrial metal

MEDIA

Tracklist

  • 01. Mr. Self Destruct Man
  • 02. Piggy
  • 03. Heresy
  • 04. March of the Pigs
  • 05. Closer
  • 06. Ruiner
  • 07. The Becoming
  • 08. I Do Not Want This
  • 09. Big Man With a Gun
  • 10. A Warm Place
  • 11. Eraser
  • 12. Reptile
  • 13. The Downward Spiral
  • 14. Hurt

Miembros

  • Trent Reznor

Análisis

por el 20 Feb 2007
21294 lecturas
Nine Inch Nails es sin lugar a dudas una de las bandas más influyentes e importantes de los 90 (y de la música en general), aunque su historia y estilo dista muchísimo de la mayor parte de grupos. Para empezar, hay que saber que Nine Inch Nails, NIN para abreviar, no era una banda en sus comienzos (1989), sino que era el pseudónimo del carismático Trent Reznor. Él solo compuso e interpretó su primer trabajo, llamado “Pretty Hate Machine”, y aunque al principio pasó desapercibido, poco a poco fue ganando popularidad y aceptación, tanto que le llegó una invitación para tocar en el festival itinerante Lollapalooza de 1991. Ante esta posibilidad de llegar a un gran público decidió contratar a músicos que le ayudasen a llevar su sonido íntegramente adaptado a los escenarios. Así nació Nine Inch Nails como grupo.

NIN es una banda que entre otras cosas, empezó a mezclar estilos completamente distintos, como son el rock gótico y la música electrónica. Coincidiendo con los inicios de Ministry, se podría decir que la banda fue una de las bandas precursoras del industrial. Pero a diferencia de Ministry, han aportado muchísimo más a la música moderna, y es que su pasión por lo oscuro, la depresión, la muerte, el suicidio, el caos humano y demás temas de crónicas negras, ha influenciado a generaciones enteras, tanto en lo musical como en lo lírico. También ayudó a resucitar (nunca mejor dicho) la música y la estética gótica, y es que sus atuendos negros, su pasión por los cementerios, catedrales y demás símbolos religiosos pervertidos, se popularizó entre miles de seguidores, con el consiguiente aporte a dicha música.

Nine Inch Nails, recibe su nombre (según leyendas urbanas, puesto que Reznor dice que su nombre es simplemente algo fácil de recordar) de las ejecuciones romanas, en concreto de los clavos que se utilizaban para fijar a los criminales en los maderos (nada de cruces ni estúpidos mitos religiosos). Así que ya desde su nombre, el elemento aterrador y siniestro invade la escucha de cualquier de sus discos.

Tras los dos primeros trabajos, no excesivamente populares, llegó este “Downward Spiral” en 1994. El disco caló hondo en la música y en las listas de ventas, tanto que no tardó en convertirse en un disco de culto. El nombre del disco, hace referencia a la desesperación humana que lleva al suicidio, hecho que queda patente en la composición lírica general del disco, de la cual uno puede deducir que se basa en las experiencias, sensaciones y pensamientos de un hombre al borde del suicidio, y que finalmente lo lleva a cabo. Espeluznante.

El disco en sí cuenta con una producción de auténtico lujo, toda ella a cargo del propio Trent Reznor (y es que me da que el resto de la banda tan solo tenía algo que ver cuando tocaba en los conciertos). Los sonidos que encierra son auténticamente dispares y desconcertantes, ya que la electrónica y el rock oscuro se intercambian el protagonismo por momentos, mientras que los temas psicóticos se entrelazan con las canciones lentas, pasivas, depresivas y sepulcrales.

Downward Spiral” es un disco bastante largo, que dura más de una hora, mezclando temas largos y temas breves. Por esta razón, no podría entrar a detallar tema por tema, pero sí hacerlo de forma generalizada y destacando lo más particular e importante de cada corte.

El primer tema de la placa se titula “Mr. Self Destruct Man”, título que ya anuncia lo que anteriormente hemos dicho: el disco gira en torno a la autodestrucción y el suicidio. La canción en sí, es poderosa, frenética y repleta de ritmos electrónicos e industriales que a pesar del paso del tiempo, siguen sonando a modernos y actuales. En contraposición, llega “Piggy”, más lenta e inquietante, y es que su aparente tranquilidad asfixia, agobia, al igual que lo hace la tranquilidad de un cementerio en plena noche.

“Heresy” resulta un intermedio entre el rock y la electrónica, siendo uno de los temas más populares del disco, mientras que “March of the Pigs” es una más que interesante mezcla de rock y electrónica repleta de distorsiones, al mismo tiempo que es una mezcla entre momentos agresivos y momentos (estribillos) calmados y pausados. Uno de los que mejores temas del disco. Como curiosidad, comentar que Reznor, escritor y compositor de todos los temas, dice que los “pigs” (cerdos) son personas que a lo largo de su vida le han hecho sufrir, como falsos amigos, personas que querían que fracasase, enemigos…

Tal vez, escuchando temas como “Closer”, uno pueda pensar que NIN tampoco es tan original, pero hay que pensar que es un disco que salió hace 10 años, y que por lo tanto, los sonidos tan parecidos y familiares de hoy en día, no son más que la evolución natural del trabajo de Trent Reznor. Grupos como Primal Scream, Prodigy o Massive Attack han bebido directamente del sonido de temas como “Closer”, tema que por otra parte estuvo de moda no hace mucho, cuando Limp Bizkit sacó al mercado su trabajo “Chocolate Starfish and the Hot Dog Flavoured Water”, y es que en el tema “Hot Dog”, utilizaba el estribillo de “Closer” para parodiar a Trent Reznor.

“Ruiner” y “The Becoming” son temas mucho más inquietantes, repletos de experimentación electrónica e instrumental. En “Ruiner” destacan esos riffs de guitarra distorsionada, casi heavy acompañados por un machacante fondo electrónico, mientras que en “The Becoming”, entre secuencia electrónica y secuencia electrónica (que recuerdan mucho al sonido de un módem al conectarse), hay paso para ritmos industriales, cantos psicóticos, y como quién no quiere la cosa, una guitarra acústica acompañada por sonidos y efectos un tanto paranormales. Dos excelentes temas, se mire por donde se mire.

Habiendo pasado el ecuador del disco, es evidente que las cualidades de “Downward Spiral” son miles: experimentación segundo tras segundo, sonidos envolventes, producción excepcional, ritmos caóticos, siniestros y pegadizos al mismo tiempo… ¿Qué más se puede pedir? Es innegable que “Downward Spiral” estaba llamado a ser lo que fue: un número uno y un disco de culto. Escuchando todas sus canciones, resulta increíble quien aun hoy en día, pretenda desmerecer el trabajo de Nine Inch Nails, y es que su música no necesita más argumentos.

Canciones como “I Do Not Want This” parecen echas al azar, porque para muchos (entre los que me incluyo) es imposible seguir una línea compositiva coherente. Parece que los sonidos se agolpen los unos con los otros, y uno nunca sabe que es lo que va a escuchar a continuación. “Big Man With a Gun” es veloz, breve y salvaje. De nuevo la idea del suicidio resulta explícita desde el título. Gritos, riffs y una batería demenciales, más las secuencias electrónicas completamente asesinas.

Si el disco en sí resulta experimental, no sé como calificar canciones como la instrumental “Warm Place”, “Eraser” y “Reptile”, una tripleta cargada de fuerza y poder, repletas de ambientes y suculentos efectos, los cuales no habían sido escuchados hasta la fecha, así que imaginad lo que supone el sonido tan característico del grupo para aquellos que vivieron de lleno la explosión de su sonido.

La canción que da título al disco, “The Downward Spiral” es a mi parecer, una de las canciones más inquietantes que jamás he escuchado. No hay una aparente melodía, incluso muchos la podrían considerar sketch o interludio, pero creo que la intención de Reznor iba mucho más allá a la hora de componer este tema, que entre gritos de dolor y sollozos te traslada a un lugar en el que jamás te habría gustado estar. Finalmente, “Hurt”, la más melódica del disco, finaliza con la vida del hombre que se quería suicidar, y da por concluida la espiral.

Como curiosidad, y para más INRI, comentar que el disco fue grabado íntegramente en la casa en la casa de Sharon Tate, actriz y modelo que fue asesinada en ese mismo lugar por la secta de Charles Manson.

En definitiva, un disco imprescindible, que no tiene un solo defecto se mire por donde se mire. Muchos critican a Reznor y los suyos por asuntos como su forma de cantar, como los sonidos aparentemente incoherentes o por la típica acusación de “pervertir mentes inocentes, incitar al suicidio” y demás, pero aquí, no queda lugar para prejuicios ni conservadurismos. Así que nos guste más o menos, aceptemos que Nine Inch Nails es innovación, es revolución y es un estilo que ha marcado a todos los nuevos grupos.


Lo Mejor: La experimentación, la influencia que ha ejercido sobre las generaciones venideras.

Lo Peor: Es un disco difícil de seguir.
 


COMENTARIOS

169 Comentarios

  • 100 Excelente

    HMP
  • 50 Mediocre
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    Espesito
  • 84 Muy Bueno

    hollow_life
  • 91 Muy Bueno
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    Falcon
    91 y eso sin ser un fan absoluto de NIN.
  • 100 Excelente
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    leon
  • 91 Muy Bueno
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    krowcuervo
    Disco con temazos, pero para ser sincero un poco rayante para ser escuchado entero, me quedo con los temazos.
  • 74 Bueno


  • 35 Malo

    meneillos
    nada, que yo tampoco le pillo el punto, pocos discos tan densos y a los que he dedicado tanto tiempo me han aportado tan poco
  • 90 Muy Bueno
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    Pachi67
  • 100 Excelente
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    lonestar
  • 100 Excelente
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    C0D160Z3R0
  • 86 Muy Bueno
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    altunenberg
  • 94 Muy Bueno


  • 100 Excelente
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    Led
  • 26 Malo
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    Kupak
    Me pone malito.
 

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