PELÍCULAS
por David Sancho el 15 de Noviembre de 2011
Comedia de acción resultona en lo formal pero absolutamente deficitaria en lo que al guión se refiere. Una película de atracos tan tontorrona como ineficaz que difícilmente colmará las expectativas de quienes veían en su director a un prometedor artesano del entretenimiento.
Año: 2011.
Título original: 30 minutes or less.
Director: Ruben Fleischer.
Guionista: Michael Diliberti, Matthew Sullivan
Productora: Media Rights Capital. Red Hour Films. Columbia Pictures.
Género: Comedia. Acción.
Reparto: Jesse Eisenberg, Danny McBride, Aziz Ansari, Nick Swardson, Michael Peña, Dilshad Vadsaria,Bianca Kajlich, Fred Ward, Elizabeth Wright Shapiro, Brett Gelman
Nota: 40.
Año: 2011.
Título original: 30 minutes or less.
Director: Ruben Fleischer.
Guionista: Michael Diliberti, Matthew Sullivan
Productora: Media Rights Capital. Red Hour Films. Columbia Pictures.
Género: Comedia. Acción.
Reparto: Jesse Eisenberg, Danny McBride, Aziz Ansari, Nick Swardson, Michael Peña, Dilshad Vadsaria,Bianca Kajlich, Fred Ward, Elizabeth Wright Shapiro, Brett Gelman
Nota: 40.
Afrontar el visionado de 30 minutos o menos teniendo en la cabeza Bienvenidos a Zombieland, película anterior de Fleischer, supone un gran handicap. Su opera prima, sin ser una obra maestra, tenía un encanto, gracia y ritmo que la convertía en un divertimento de bastante nivel, mérito del que se ha quedado a gran distancia con su nueva película.
La película nos cuenta la historia de un repartidor de pizza que es obligado a robar un banco cuando le ponen un chaleco cargado de explosivos. Al igual que en su ópera prima, los primeros minutos de la cinta son los más conseguidos, lástima que esta vez sea más por demérito del conjunto de la obra que por la genialidad de su inicio. A partir de los primeros diez minutos todo se vuelve previsible y muy poco gracioso, a lo cual no ayuda un reparto formado por algunos de los actores de moda dentro de la comedia americana, siendo la mayoría de ellos actores de un solo papel que irán cayendo por su propio peso. Mención aparte merece Jesse Eisenberg, actor con una carrera meteórica gracias sobretodo a la agradable Adventureland y a la genial La red social, pero que sigue demostrando que su éxito se debe en gran medida a la suerte que ha tenido cayendo en esos proyectos que a un verdadero talento.
Oportunidad perdida por Fleischer para consolidar su carrera y conseguir situarse entre la élite de los directores de películas de entretenimiento, consiguiendo en cambio dar un paso atrás y reduciendo las expectativas sobre su próximo, e interesantísimo, nuevo proyecto con Ryan Gosling y Sean Penn a la cabeza, el cual afrontaremos con ciertas reticencias y el miedo a una posible decepción, la cual intuyo que seguirá aumentando cuando lleve a cabo la innecesaria secuela en 3D de Bienvenidos a Zombieland.
La película nos cuenta la historia de un repartidor de pizza que es obligado a robar un banco cuando le ponen un chaleco cargado de explosivos. Al igual que en su ópera prima, los primeros minutos de la cinta son los más conseguidos, lástima que esta vez sea más por demérito del conjunto de la obra que por la genialidad de su inicio. A partir de los primeros diez minutos todo se vuelve previsible y muy poco gracioso, a lo cual no ayuda un reparto formado por algunos de los actores de moda dentro de la comedia americana, siendo la mayoría de ellos actores de un solo papel que irán cayendo por su propio peso. Mención aparte merece Jesse Eisenberg, actor con una carrera meteórica gracias sobretodo a la agradable Adventureland y a la genial La red social, pero que sigue demostrando que su éxito se debe en gran medida a la suerte que ha tenido cayendo en esos proyectos que a un verdadero talento.
Oportunidad perdida por Fleischer para consolidar su carrera y conseguir situarse entre la élite de los directores de películas de entretenimiento, consiguiendo en cambio dar un paso atrás y reduciendo las expectativas sobre su próximo, e interesantísimo, nuevo proyecto con Ryan Gosling y Sean Penn a la cabeza, el cual afrontaremos con ciertas reticencias y el miedo a una posible decepción, la cual intuyo que seguirá aumentando cuando lleve a cabo la innecesaria secuela en 3D de Bienvenidos a Zombieland.
