ENTREVISTA

¿Qué ha pasado con Dismal estos 4 años de ausencia?

Seguimos sin parar, a nuestro ritmo, ensayando en el local todas las semanas, lo que pasa es que, claro, sacamos el disco en 2002, giramos todo ese año hasta mediados de 2003, y después del verano de aquel año nos pusimos con los temas nuevos. Tuvimos una reunión y nos dijimos que nos lo íbamos a tomar con mucha calma. Al final, la calma fue a lo mejor demasiada, pero bueno, estuvo bien. También valió para reencontrarnos un poco con nosotros mismos y cambiar un poco. Hicimos los temas, grabamos la preproducción, después grabamos el disco, pues ya hace bastante, entre 2005 y 2006. Estuvimos buscando compañía. Queríamos una compañía que realmente estuviera interesada. No pudo ser, no hubo ninguna que nos convenciera, con lo cuál, decidimos autoeditarlo, y esto llevo también su tiempo.

¿Cuáles son las diferencias más notables entre Neptuno y El Tristeza?

La principal es la madurez, aunque seguimos siendo unos inmaduros, jeje. Son canciones más abiertas. Hay más melodía y también más fuerza, pero no de contundencia ni de brutalidad, sino que es más directo, nos desnudamos más. El hecho de cambiar al castellano también es clave. Sigue teniendo nuestra esencia, pero claro, también evolucionamos.

Coméntame los cambios de formación.

En la gira de El Tristeza, entro Gonzalo, sustituyendo a Lino, en la batería. Después de grabar el disco, Carlos Fuentes, teclista, decidió marcharse por mutuo acuerdo, y entro Tino Álvarez en su lugar. Y yo, pues decidí dejar el bajo para disfrutar más los conciertos la verdad. Invitamos a Ralph porque es un colega de siempre, además de mejor bajista que yo, y de forma muy natural entro a formar parte del grupo. Los cambios para nosotros enriquecen, porque siempre traen cosas nuevas.

¿Qué aportaron los nuevos miembros a este nuevo disco?

Pues Gonzalo una concepción diferente de tocar la batería basicamente, pero creo que al ser bastante joven ha aprendido más de lo que ha aportado, pero eso está muy bien. Seguro que en futuro aporta mucho más. Ralph no aporto mucho al disco porque las líneas de bajo ya las tenía compuestas yo, pero en el futuro se hará notar, porque es un bajista mucho más versátil que yo. Y Tino, en fin, es un monstruo, es multiinstrumentista, toca lo que le dejen, y hace canciones enteras incluso, es un máquina.

Con la perspectiva que confieren los años, ¿os sentís satisfechos con la evolución que ha llevado Dismal?

Si, si. Hombre, no se, es como la vida, cambiarías mil historias, pero hay que pensar tú eres lo que eres gracias a lo que has sido. Eres la suma de lo que hiciste. Siempre hemos hecho lo que nos apeteció en su momento y lo seguiremos haciendo, no hemos estado sujetos a nada, ni al éxito, ni nada de eso, siempre hemos hecho lo que nos gusta. Estamos muy satisfechos. Desde nuestra maqueta, en la que hacíamos death metal, ahora la escuchas y siempre lo recuerdas con cariño.

¿Por qué el cambio al castellano en las letras?

La verdad es que siempre he escuchado grupos en inglés, y por eso, antes cantaba en inglés, y no me encontraba a gusto con el castellano. En el segundo disco metimos el tema “Ser Diferente”, que surgiera casualmente, y nos quedamos a gusto. En “El Tristeza” metimos ya tres temas. Y en “Neptuno” ya, me plantée que debía pasarme totalmente al castellano, porque podía meter cinco temas, pero no iba a quedar bien. Además, los cinco componentes restantes, el productor, el mánager, todo el que nos rodeaba, pensaba que debíamos cambiarnos al castellano, y bueno, a mi también me apetecía, y tampoco les iba llevar la contraria.

¿Por qué el título de “Neptuno”?

Lo de los títulos siempre intento encontrar algo que conceptualmente englobe la esencia del disco. Escogí “Neptuno” porque iba muy bien con todo este tiempo que hemos estado apartados del mundillo musical, lejos, haciendo música, pero sólo para nosotros, sin presiones. Además con la fotos tan desérticas van bien.

¿No crees que tendréis que trabajar un poco más por haceros un hueco?

Si, puede que si, pero nosotros hacemos hasta donde podemos: hacer buenos temas, tocarlos en directo dándolo todo y dejar satisfecha la gente. Pero, para mi la música no es una competeción, intento disfrutarla día a día, sobre todo, después de tantos años. Desde luego, que soy muy ambicioso, y a cuánta más gente llegue mejor, pero no es la prioridad ni mucho menos, la prioridad es sentirme bien.

¿Cómo fue el proceso de grabación con Alberto Castro?

Largo, estuvimos un año y medio maquetando los temas, retocándolos. Elegimos doce temas y descartamos dos. A partir de finales de 2005 empezamos la posproducción y durante seis meses arreglamos todos los temas, cuánto nos apeteció, en la casa de Alberto y luego nos fuimos a mezclar a Madrid en marzo y abril de 2006.

Coméntame las colaboraciones del disco.

DJ Laese es un habitual ya, lo de siempre. Le dijimos que metiera unos scratches y sin problema lo hizo en “Fuego”, “Trae el Cuento” y “Libérate”. Después, pues ya hace un tiempo un cantante de hiphop pues me comento de hacer un tema, pero dándole vueltas al asunto, pues decidí hacerlo yo, con la gente que me gusta, y elegí a Camilo, alias Loko 23, de Delahoja para “Trae el Cuento”. Para mi, es un fenómeno, yo tengo auténtica devoción por él. Después, está una amiga escocesa, Maureen Kinnear, que mete voces en “Salir de mi”, “Bajo mi Piel” y “Trae el Cuento”. Luego está Vicente de Kannon, que se paso por el estudio para grabar unas voces en “Seguir adelante”, que había unas frases que creía que le iban muy bien, pero claro, escucho “Fuego”, y también quiso apuntarse. Al día siguiente vino con una letra y probamos.

¿Por qué un DVD ahora?

La idea fue de nuestra agencia de management La Fábrica de Chocolate, de grabar un concierto para promocionarnos, y que nos vieran en directo las discográficas y tal. Al final, lo típico, quieres algo económico, te emocionas y compras lo mejor, porque te gusta. Nos gustó el resultado, algo raro, porque siempre encuentro defectos en nuestros directos, y decidimos publicarlo junto a los videoclips. Así, a los seguidores también le hará más ilusión tener un DVD del grupo. Es una forma de recompensar la espera y una carta de invitación a los nuevos seguidores.

¿Cómo surgió La Fábrica de Chocolate?

Realmente, le llamamos así porque es nuestra agencia de management, además de gestionar la sala La Fábrica de Chocolate en Vigo, por no llamarle de otro manera. A mi me apetecía llamarle Viascón Records, pero no me dejaron (-ndr. Viascón es el lugar de origen de José Barros, en la periferia de la ciudad de Pontevedra.). Entre nosotros y ellos pues lo curramos y al final salimos.

¿Cuáles son los planes de gira?

Ahora mismo, estamos cerrando en Galicia por el IGAEM. En los próximos mese tocaremos por Galicia, sobre todo, y después intentaremos salir por la península. Tenemos que tocar lo máximo posible.

Muchas gracias por todo, nada más.

A ti.


Fotos: Dismal