Taking Back Sunday

Llega un momento en el que a un grupo como Taking Back Sunday no sabes si admirarlo, ignorarlo o repudiarlo, porque se trata de un grupo perfecto para preguntarse constantemente “¿y si...?”. Me explico. Taking Back Sunday han sacado este 2011 su quinto disco de estudio, recuperando la formación original del grupo después de incontables idas y venidas de distintos miembros. Siempre han vendido sus nuevos trabajos como discos llenos de frescor, donde los nuevos miembros han dado un nuevo aire al grupo y bla, bla, bla. Pero, ¿y si Fred Mascherino se hubiese quedado? ¿Y si nunca hubiesen cambiado a nadie? Por lo visto ahora, me da la sensación que, de haber conservado todos sus miembros originales hasta ahora, por ejemplo, su trayectoria no habría cambiado en exceso. Quizá porque Adam Lazzara lo controla todo, o quizá simplemente cambiar es el único camino que ha encontrado el grupo para sobrevivir en una escena tan convulsa como la “emo” - la que adopta el sentido más trivializado de la palabra -, desde que ayudasen a crearla con ese lejano "Tell are your friends". La pequeña evolución que han ido haciendo suena, guste o no, coherente, y titular este trabajo de forma homónima creo que tiene más de consolidación que no de nuevo punto de partida.

A su favor, hay que decir que Taking Back Sunday no tienen disco malo. Son auténticos profesionales, y su mezcla de emo adolescente y punk pop sigue siendo resultona. Un nuevo trabajo suyo te garantiza estribillos pegadizos, coros molones, algunas buenas guitarras y piruetas de Lazzara con el micrófono (vocales y en directo). En su contra, también te garantiza un notable bajón a mitad del disco y sensación de repetición, pero eso ya no sé si es defecto suyo o seña de identidad de la banda. Eso si, los comienzos de disco siempre rayan a gran nivel. "El Paso" es una buena abertura, de lo más rock que han hecho nunca y lo más potente del disco. "Money (Let it go)" no le anda tampoco muy lejos. También intentan abrir un poco sus miras en "Faith (When I Let You Down)", añadiendo a su estilo unos coros y un sonido ampuloso semi-religioso, muy en la onda de 30 Seconds To Mars. En cambio "Best Places to Be a Mom", se revela con el clásico sonido de la banda y un gran estribillo, igual que una "Sad Savior" cuyo principio hace temer un exceso de azúcar. "Who Are You Anyway" en cambio amaga un estribillo explosivo más genérico y previsible, pero sus estrofas son de las más juguetonas del disco. "This is All Now", "It Doesn't feel a Think Like Falling" ya empiezan a suponer ese característico bajón del álbum, pero más que por poca calidad, por reiteración. En cambio "Since You're Gone" es una cursilada a la que cuesta no darle al 'skip' si uno no es muy aficionado al emo del palo. Horrible, de lo peor que han hecho. Quizá por ella, "You Got Me" y "Call Me in the Morning" hacen un final bastante decente, la primera por pegadiza, y la segunda porque algo dulzón para los postres tampoco viene mal si está hecho con gusto, pese a que hayan robado todos los ingredientes de la despensa de U2.

En definitiva, "Taking Back Sunday" no es una nueva reinvención del grupo, es simplemente un disco más, con sus pros y sus contras, que eleva un poco el nivel respecto a su antecesor, el inferior pero infravalorado "New Again". Sin ser una maravilla, se deja escuchar, tiene partes que enganchan y en definitiva, el disco aprueba. Otra cosa es que, teniendo el grupo el nombre que tiene, no le podamos pedir más, porque estoy convencido de que si se alejasen un poco de lo convencional, podrían ser bastante mejores. Siendo así sobreviven, cosa que ya tiene mérito, pero ¿y si lo intentasen?