Cuando una idea es buena, es buena. Y la que tuvo un colega al proponernos hacer una cena de gala para hacer la reglamentaria cena de navidad de la peña, me pareció desde un principio buenísima.
El caso es que somos demasiado jovenes (ninguno de nosotros supera los 23 años) para eso de andar casandonos y tal, así que fue la primera vez que coincidimos todos vestidos de traje, con las consecuentes risas y sorpresas.
Fue una noche genial, en la que pasaron 1.000 cosas increíbles (yo creo que nunca en la vida había habido tanto desparrame en todos los sentidos como aquella noche) que no voy a contar por eso de la intimidad y tal, jaja.
Fue una cena de gala completamente organizada por nosotros mismos. Cocinó un colega que es chef (los que seáis de Barcelona, si os suena el Rias de Galicia, una de las mejores marisquerías de la ciudad, él estuvo trabajando allí) y cocina cojonudamente. Hubo bebida a raudales, mêtres improvisados... en fín, que vale más una imagen que mil palabras. Así que os dejo algunas imagenes de la cena.
Lo que está claro, es que de esto ningunX de nosotrXs se va a olvidar jamás. Lo allí vivido fue épico.
· La mesa, en redonda para vernos todos los jetos, que fueron en constante declive:
· Ahí al fondo está la mesa donde estaban los aperitivos y la bebida. Era en plan boda, con un colega sirviendo las copas:
· Aquí estoy con dos de mis mejores colegas, Mr. Xavo y Mr. Vieito. Éste último, como veis, era el cocinero
· Alcohol haciendo efecto (servidor partiéndose el culo):
· Foto de grupo (es que es para enmarcarla xD):
RESULTADO: Dormir 2 horas e ir a trabajar con un resacón DE LA OSTIA (algo exagerado), pero con una sonrisa en la cara de esas de oreja a oreja.