Leviathan

Publicación:: Noviembre 2024
Sello:: Autoeditado
Productor:: J. M. Tornay
Género:: metal, nacional
Estilos:: death metal

MEDIA

Disco completo en Spotify

Tracklist

01. Leviathan
02. The Philanthropist
03. Warmonger
04. Cognitive Warfare

Miembros

Tornay: guitarras
Alex Guerrero: Guitarras
Arnau Martí: batería
Stefan Hielscher: bajo, voz

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Análisis

por César Aguilar el 17 Dic 2024

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“The Forces of Darkness” (2017), el álbum debut del entonces dúo alemán Rebel Souls, es una de esas infrecuentes colecciones de canciones a las que es fácil coger cariño por razones que van más allá de sus, por otro lado, estupendos ocho cortes. Fruto de la larga amistad de Stefan Hielscher (voz, bajo) y Thomas Plewnia (guitarra), que empezaron el proyecto en el instituto como buenos freaks enamorados del death y el thrash metal, el disco, la recreación de su demo “Dark Forces” (2001), es un excelente compendio de estribillos pegadizos y riffs revientacráneos, una obra modesta en la forma y en el fondo que entiende la veneración al death metal de la vieja escuela no como la excusa más elegante para replicar burdamente los clichés del género, sino como una expresión de amor y respeto hacia los padres del estilo.

En su segundo largo, “Dawn of Depravity” (en parte basado en su segunda demo “Estrangement. Disillusion. Frost.”), la revolución fue (casi) total. Thomas dejó la formación por falta de tiempo y Stefan no tuvo más remedio que echarse el grupo a la espalda. Reclutó a Alex Guerrero (Krypticy) y J. M. Tornay (productor de la banda) a las seis cuerdas y Arnau Martí (Noctem, Saratoga) a la batería y el resultado fue un álbum más variado, ambicioso y aperturista en el que no falta algún que otro ramalazo progresivo y una mayor dosis de técnica. Una muestra de su evolución en todos los sentidos que bien podría ser considerada su obra más depurada.

Prácticamente cuando se cumple el segundo aniversario de la edición de “Dawn of Depravity”, la banda vuelve con “Leviathan”, un EP de cuatro canciones en diecisiete minutos. Y confieso que, de haber catado a ciegas y de un tirón toda su discografía, hubiera situado esta nueva referencia como una especie de bisagra o puente entre sus dos largos. Porque por un lado “Leviathan” posee el sonido crudo y al hueso de “The Forces of Darkness” y por otro presenta sobrados ejemplos de la evolución compositiva y la mayor variedad de “Dawn of Depravity”.

Pero, sin detenerse en detalles y yendo directamente al fondo de la cuestión, en “Leviathan” el cuarteto vuelve a hacer lo que mejor sabe, ese death metal de la vieja escuela de carácter técnico pero nada exhibicionista repleto de dinámicas y riffs endiablados, que en lo que a mí respecta nació en Florida con “Altars of Madness” de Morbid Angel y cuenta con ilustres alumnos en el mundo entero, por ejemplo unos Vader en Polonia o Krisiun en Brasil. En estos cuatro cortes encontramos todos los ingredientes que han hecho grandes a Rebel Souls y, como siempre en cada una de sus referencias, alguna sorpresa. El tema título es una perfecta introducción que incluye guiños black, cambios constantes de dinámica y el toque pegadizo que les caracteriza. En la excelente “The Philanthropist” queda más que patente la bajada de revoluciones que la banda ha experimentado en este EP (ni una sola aceleración en sus 4:26 de duración) y en “Warmonger”, tal vez la más incluible en “The Forces of Darkness”, con ese estribillo tan memorable, aparecen las influencias de Deicide en el tempo y la cadencia de la voz de Stefan. Por último, mi favorita, “Cognitive Warfare”, está repleta de subidas y bajadas y tiene un riff inicial simple que se te clava en las meninges y no te suelta. En algún momento puede recordar perfectamente a los Death de Chuck Schuldiner en su etapa técnica.

En definitiva, pese a su corta duración “Leviathan” es una adición nada desdeñable a la discografía de Rebel Souls. Un EP grabado por fans y para fans desde la entraña de quien entiende a la perfección los entresijos de un estilo de música, no porque sepa dividirlo en compases, escalas y demás útiles zarandajas de la teoría musical ni por usar tal o cual pedal de guitarra universalmente aceptado, sino porque lo siente y además tiene la capacidad necesaria para darle vida. Esperemos que la llama no se extinga y podamos disfrutar de muchas más muestras del talento del cuarteto.

Lo Mejor: La inagotable capacidad de la banda para sacar petróleo de un estilo tan sobado.

Lo Peor: Evidentemente, su corta duración.