Llop12 escribió:¿Alguna vez os ha pasado que sentís como que hace mogollón que no sois felices ni sentís felicidad por nada?
Te voy a contar una anécdota.
Esta historia que te voy a contar data del año 2007, creo. Tenía previsto viajar a Barcelona (soy de Madrid) para ir a un concierto, al de Incubus, concretamente, creo que fue el último concierto que ha dado en Barcelona si no me equivoco.
Tenía 19 años, era la primera vez que viajaba sólo (sin familia, ni amigos, ni, en definitiva, acompañante) y también era la primera vez que viajaba a Barcelona. El concierto era en septiembre, y el viaje empecé a prepararlo en junio/julio. En el momento de prepararlo estaba realmente ilusionado, aunque tenía un poquitín de miedo porque, al ir sólo, me preocupaba que me pasara algo malo en la ciudad condal y, si me pasaba, cómo afrontarlo.
Un dato importante en esta historia es que yo, de siempre, he sido un chico sobreprotegido por mis padres. Con lo cual, cuando se enteraron de que me quería ir de viaje no se lo tomaron muy bien y las posteriores discusiones e intento de prohibición desgastó mi ilusión, pero sin llegar a destruirla.
Lo que llegó a destruir mi ilusión fue lo que pasó después, cuando unos indeseables me sometieron a una presión muy grande, llegando a meterse conmigo, faltarme al respeto e, incluso, influir a otras personas para que hicieran conmigo lo mismo que hacían ellos. Por la personalidad que tenía a esa edad (demasiado infantil para tener 19 años), he sido un chico propenso a sufrir este tipo de cosas.
A lo que voy, llegué a estar en una situación como la que comentas. No era feliz y, a pesar de tener este viaje a la vuelta de la esquina, un viaje ilusionante, no aumentaba mi felicidad. Recuerdo que le conté a un amigo que iba a viajar porque ya lo tenía todo pagado, pero que si se me truncara el viaje no iba a sentir pena.
Pues finalmente llegó septiembre, viajé y..., me "curé". Bueno, provisionalmente, porque me siguieron pasando cosas malas posteriormente, pero centrándome en lo del viaje, he de decir que ha sido una de las mejores cosas que he hecho en mi vida. Renové ilusiones olvidadas y me sentí genial a mi vuelta a Madrid. Me sentía realmente feliz.
Descubrí una ciudad muy hermosa, disfruté de una gran concierto y llegué a un momento en el que olvidé todo cuando sonó 'Diamonds and coal' en la Razzmatazz y sólo sentí placer y bienestar.
Conclusión: piensa Llop, piensa en cosas que te gustan, piensa en algo que hace tiempo que no haces pero te gustaría volver a hacer. Recuerda tus antiguas ilusiones y renuévalas. Hazlo aunque te parezca una estupidez porque a lo mejor, cuando lo hagas, descubres el camino a seguir para no caer en esa sensación de apatía.