ENTREVISTA

Parece que fue ayer cuando disfrutábamos de "Revolución 12.111" y ya ha transcurrido un cuarto de siglo. ¿Sientes que el tiempo ha pasado demasiado rápido?

Justo hace nada estaba pensando en eso, y también en lo efímero que se hacen los pasos después de este disco, quizás porque ya toda nuestra vida se dirigió al grupo con ciclos de giras, discos más o menos seguidos, etc. Como que no da tiempo de pensar más allá que en el paso siguiente, sin volver la mirada atrás para valorar lo hecho. Ahora, cuando llegan estos aniversarios, es una buena forma de recordar muchas cosas sucedidas con este disco, por ejemplo.

Con "Sanatorio de muñecos" (1994) digamos que Hamlet encontró su camino, pero el salto respecto a "Revolución 12.111" fue espectacular en todos los sentidos. Aún me sigue sorprendiendo el momento de inspiración que debisteis vivir cada vez que me lo pongo.

Realmente, muchas canciones de "Revolución" son de la época de "Sanatorio", o incluso antes, ya que esos años de local de ensayo día y tarde sin giras nos hacia ser mas "dedicados" a componer y componer porque no había otra cosa. Pero "Sanatorio", al empezar a ser conocido, nos hizo dar muchos conciertos y apartamos esas canciones, por decirlo de alguna manera, y cuando se retomaron para hacer otro disco esa cantidad de conciertos nos hizo mejores en cómo evolucionar, y en tocar mejor. También en ganar personalidad, ser más versátiles en incorporar nuevos elementos en nuestra música.

¿Recuerdas el momento en el que fueron creándose los temas? Los que costaron más y los que menos, los que pensabais que iban a funcionar desde el principio o los que tal vez os sorprendieron...

Te prometo que solo nos guiábamos porque hicieran temblar las paredes del local de ensayo, y no lo digo como topicazo. Siempre hemos ensayado como si fuéramos a tocar, nada de estar sentados o algo así, sino que nos disparara la adrenalina. Por eso de verdad que nunca pensábamos si estábamos haciendo un "hit" o algo parecido, además de verdad que ni lo pretendíamos. Hay que poner en contexto la época, nosotros para darnos a conocer solo podíamos tocar y tocar, mandar discos a las llamadas radios "libres" de aquellos años, a fanzines y alguna revista, así que... ¿quiénes iban a ponernos tan a saco como para pensar que funcionaría de forma más masiva? Nos daba igual, solo queríamos hacer un disco muy completo con todo lo que nos gusta de nosotros.

También tocábamos unas cuatro canciones ya en directo sin haber grabado el disco, y la gente las acogía muy bien. Así que creíamos que íbamos por el buen camino con las demás antes de entrar a grabarlo.

Fascismo, desigualdad, racismo, corrupción, malos tratos... Igual las formas han cambiado, pero las letras siguen teniendo la misma vigencia 25 años después.

Estas son las cosas que valoramos mucho con el tiempo, que un disco no quedara desfasado ni a nivel de letras ni de música, y creemos que en todo sigue siendo realmente muy actual. Por eso si tocamos ahora una canción de este disco nos suena muy fresco a nosotros mismos.

Hay gente que considera "Revolución 12.111" pionero del nu-metal en España, y aunque posiblemente lo sea, yo siempre lo vi más como una mezcla del groove de Pantera o Fear Factory y el crossover de bandas como Biohazard. Hay momentos en los que te puedes visualizar en cualquier barrio conflictivo de New York.

Siempre nos dio rabia que este disco y otros se etiquetaran o encasillaran en un movimiento posterior. Realmente el nu-metal apareció después, y además con otros elementos que nosotros no teníamos. Lógicamente, en algunos casos lo entendemos como la imagen y ciertas sonoridades, pero nosotros teníamos otro camino que en ese momento no estaba ni asociado a ese movimiento quizás porque, como he dicho, ni existía como tal.

¿Sin qué otras bandas no hubiese existido "Revolución 12.111"?

Nuestras influencias venían del hardcore de bandas como Snapcase, Helmet, Biohazard o Sick Of It All, pero también mucho de grupos como Faith No More, Rage Against The Machine, por supuesto que Pantera, Sepultura, Napalm Death... todo eso en una coctelera está en "Revolución 12.111".  

Volvéis a los estudios Morrisound de Tampa (Florida) para grabar con Tom Morris, productor de reputación internacional. Ahora esto es algo habitual, pero no por aquél entonces.

Nuestras experiencias fueron muy negativas en grabaciones anteriores a "Sanatorio", que es cuando empezamos a buscar gente fuera, y por eso a partir de ahí era algo obligado si alguien quería sacar un disco nuestro. Vimos antes de ir con alguien de fuera que no nos entendían nada de nada por donde queríamos llegar en un estudio. Y eso nos marcó mucho. Afortunadamente, años después todo cambió y ahora hay gente al mismo nivel que lo que hay fuera.

El sonido es crudo y básico si lo comparamos con una producción actual, pero también es una de las señas características del disco, ¿no? Si es que hasta el discutible sonido de batería tiene un encanto especial...

Jajaja... ¿discutible por? No, en serio, nosotros queríamos ese sonido de batería, Tom Morris y la gente implicada lo veía perfecto para el disco, y es que sin ese sonido no sería nada igual. Para nosotros, hablando ya del sonido general, es de los que mejor suena de toda nuestra carrera. Crudo, muy directo y con mucha intensidad.

Me alegra saberlo, de verdad, le da todo el rollo. ¿Qué papel ejerció Tom respecto al disco, el de productor que se involucra en el proceso de creación o simplemente el de un ingeniero de sonido?

Siempre mandamos una maqueta o demo antes para que vean las canciones y den su punto de vista. Nos sugieren ideas, pero sobre todo en este caso Tom lo que hizo es focalizar cómo grabarlo. Tocando todos a la vez, incluso Molly con la voz, grabando muchas tomas hasta que elegía la mejor. Y siempre focalizado en la brutalidad, porque era la seña de identidad de los Morrisound Studios y de los grupos que grababan alli. Toda esa escena death metalera estaba impregnada allí, lo que nos vino muy bien, aunque la música no fuera la misma.

Es verdad. Cuando uno piensa en los estudios Morrisound le vienen a la cabeza Sepultura, Napalm Death, Obituary o Deicide. ¿Qué ambiente se respiraba en uno de los templos de la ola death metal de los 90?

Un poco lo que te contaba antes, estaba totalmente impregnado ahí. Así que ir "blandito" como que no, jajaja...

Seguro que tienes más de una anécdota de vuestra estancia allí...

¡Anécdotas muchas! Imagina 5 chavalitos unas semanas perdidos en Tampa, jaja… Pero nos quedamos con la estancia en el estudio que al final haces amistad con la gente de allí, nuestra locura diferente a su cultura al final hizo piña. Scott Burns (que era el productor referencia del movimiento death de la época) acabó haciendo de ingeniero en varias partes, programó las batería electrónica de la canción “No Invasión” para darle un toque a lo Ministry que a él le flipaban. Es decir, que al final estábamos muy a gusto todos allí y se echa de menos aún después de tanto tiempo.

El disco convierte a Hamlet, casi de repente, en la mayor referencia estatal del género. ¿Cómo recuerdas aquél momento? ¿Os pilla por sorpresa?

Claro que nos pilla por sorpresa, pero aunque ahora parezca que fue algo rápido, nunca tuvimos esa sensación de que tenía cierto éxito hasta mucho después de salir. Lo que sí veíamos es que íbamos creciendo como banda desde "Sanatorio de muñecos", cada vez venia más gente a vernos, pasábamos de tocar en sitios muy pequeñitos a sitios más grandes. Luego empezábamos a tocar en festivales, Radio 3 nos empezaba a poner y rompíamos una barrera que parecía tabú con nuestra música. Un grupo como nosotros saliendo en medios que parecían que no eran afines. Y los que se suponía afines nos daban de lado por eso mismo. Era una locura, algo que nos hizo cada vez ir más a nuestro aire y tirar por nuestro camino afortunadamente.

Ya hemos hablado de las letras y el sonido, pero siempre hace falta algo extra para cuajar. ¿Cuál fue el secreto?

El secreto siempre ha sido tocar y tocar las canciones, ensayar mucho y no tener miedo al qué dirán.

El contexto temporal también es siempre importante. Sin ir más lejos, 1996 vio nacer el "Evil Empire" de Rage Against The Machine, el "Roots" de Sepultura, el "Antichrist Superstar" de Marilyn Manson o el "Ænima" de Tool. Junto a "Revolución 12.111", discos que marcaron a toda una generación.

Es que todo influyó, era una época tremenda de grupazos, discazos con sonidos diferentes y muy nuevos, de mezclas de estilos. Era un romper con muchas cosas establecidas que a "Revolución 12.111" le hizo mucho bien.

No hay mucho material audiovisual de la época, pero el concierto del Espárrago Rock 1997 que también habéis compartido vosotros en redes hace nada es mitiquísimo. Hay incluso vídeos de reacciones en YouTube (risas).


Espárrago Rock, Festimad, Dr. Music, invitados de Rage Against The Machine en Granada, de Molotov en México... Tampoco había gaztetxe, sala o ciudad que se librara de Hamlet en aquella época. ¿Qué recuerdos tienes de esa interminable gira?

Pues imagínate, un grupo que siempre ha vivido para tocar, que es su modus operandi incluso modo vital se puede decir, fue como cumplir un sueño.

Te tengo como un músico inquieto y muy perfeccionista. ¿Hubo algún momento en estos 25 años en el que hubieras cambiado algo del disco?

Solo tiene una cosa mejorable, y es el mastering. Ojo, no digo las mezclas (que hay gente que confunde los dos procesos), hablo del tipo de mastering que se hacía en aquella época, que era prácticamente inexistente en comparación como es ahora. Mejoraría el sonido general seguro para hacerlo más bruto aún, jajaja.

La evolución respecto a "Insomnio" (1998) también fue importante, con un sonido más pulido e invitando a la melodía. ¿Os auto-impusisteis no componer otro "Revolución 12.111"?

Todo el mundo que nos sigue sabe que no haríamos dos discos iguales seguidos. Fue totalmente auto-impuesto. Es una forma de buscar retos diferentes para nosotros, siempre lo hemos dicho. Luego cada uno tendrá sus preferidos, pero como músicos necesitamos de esos cambios para hacer el grupo atractivo para nosotros mismos.

Ambos álbumes lideran mi ranking particular de Hamlet. Sé que desde dentro debe ser más complicado mojarse, pero ¿en qué posición lo situarías tú a día de hoy?

No solo para mi, para todo el grupo está en el top 3 seguro. Ya el orden de esos tres favoritos es complicado.

Vuestro line-up actual ya es de los más compactos y duraderos de vuestra carrera, pero aquella formación clásica la completaban Pedro Sánchez y Augusto, dos piezas muy importantes en la historia de Hamlet. ¿Seguís manteniendo relación con ellos?

Con Augusto más, pero lógicamente el tiempo nos ha hecho distanciarnos. Aunque no hay ningún problema con ninguno de ellos.

Quien os siga en redes sociales sabrá que hay planes de celebrar el 25º aniversario del disco de alguna manera. Imagino que todavía no se puede desvelar nada, pero ¿nos puedes comentar algo de esto? ¿Hasta dónde puedes leer? (risas).

No quiero entrar en detalles porque estamos viendo las opciones, pero sí, ¡habrá celebración por todo lo alto! Estad atentos que pronto diremos todo lo que queremos hacer.